Trabajo, familia,
amigos, flirteos, hobbies. Nunca llegas a estar del todo presente. Siempre hay
prisa por empezar y terminar, cierto. Estás ocupado.
Lee este post sobre
estar demasiado ocupado.
Probablemente escribiría este mismo post veinte o treinta veces más.
Primordialmente porque:
1. Tenía que hacerlo,
no dominas tu tiempo,
todo lo contrario, el tiempo te domina a ti.
2. Todo lo que haces es
andar desde el comienzo hacia el final de tu vida. Acabar antes de empezar.
Tu atención y tu tiempo
son dos activos valiosos y tú (nosotros, ellos) estás malgastándolos. Estás
difundiéndolos, no viviéndolos. Estás revocando el mismo poder que puede
atravesar dos pulgadas de acero y convertirse en la misma luz suave que
calienta un campo de margaritas.
Y esa es la razón por la
cual no eres tan exitoso como quieres ser.
Piénsalo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario